Sabemos que la enfermedad de Parkinson (EP) es un trastorno neurodegenerativo que afecta principalmente el sistema motor, provocando síntomas como temblores, rigidez y lentitud en los movimientos. Sin embargo, menos conocidas son las alteraciones del comportamiento que también pueden surgir en las personas que padecen esta enfermedad. Entre ellas, uno de los problemas más relevantes y perturbadores es el trastorno del control de impulsos (TCI).

¿Qué es el Trastorno del Control de Impulsos?
El TCI se refiere a la incapacidad para resistir deseos o impulsos que pueden llevar a conductas excesivas o inapropiadas, que resultan dañinas para la persona o su entorno. En el contexto del Parkinson, algunos de los comportamientos más comunes asociados con el TCI son:
- Juego patológico: Compulsión por apostar grandes cantidades de dinero en juegos de azar.
- Compras compulsivas: Gastar en exceso en objetos innecesarios.
- Hiperfagia: Comer en exceso, a menudo sin hambre.
- Hipersexualidad: Aumento en el deseo sexual o comportamiento sexual inapropiado.

¿Por qué ocurre el Trastorno del Control de Impulsos en el Parkinson?
El origen del TCI en pacientes con Parkinson está relacionado principalmente con el tratamiento de la enfermedad, en especial con los agonistas dopaminérgicos, un grupo de medicamentos que se utilizan para estimular los receptores de dopamina en el cerebro. En la EP, la pérdida de neuronas productoras de dopamina afecta las funciones motoras, por lo que estos medicamentos buscan compensar ese déficit. Sin embargo, la dopamina también está involucrada en el sistema de recompensa y placer del cerebro, lo que explica por qué los agonistas dopaminérgicos pueden alterar el comportamiento.
Cuando los niveles de dopamina se alteran, se produce una disfunción en los circuitos cerebrales que regulan la toma de decisiones, el autocontrol y la gratificación instantánea. Esto puede desencadenar una necesidad urgente e irresistible de realizar ciertas acciones sin considerar las consecuencias a largo plazo, lo que caracteriza al TCI.
Factores de Riesgo
Aunque no todos los pacientes con Parkinson desarrollan TCI, ciertos factores aumentan el riesgo de sufrir este trastorno:
- Uso de agonistas dopaminérgicos: Los medicamentos como pramipexol y ropinirol están particularmente asociados con el TCI.
- Edad temprana de inicio del Parkinson: Los pacientes más jóvenes que inician el tratamiento con medicamentos dopaminérgicos parecen tener mayor riesgo.
- Historia previa de conductas impulsivas: Aquellos con antecedentes de adicciones o comportamientos impulsivos tienen mayor probabilidad de desarrollar TCI.
- Dosis elevada de medicamentos: Cuanto más alta sea la dosis de agonistas dopaminérgicos, mayor es el riesgo.
Cómo Detectar el TCI en el Parkinson
Es fundamental estar alerta a cualquier cambio en el comportamiento de una persona con Parkinson que esté en tratamiento con agonistas dopaminérgicos. Algunos signos que pueden sugerir la presencia de TCI incluyen:
- Gasto descontrolado de dinero, especialmente en compras innecesarias o apuestas.
- Incremento repentino y excesivo de la actividad sexual.
- Consumo desmedido de alimentos, a menudo sin hambre.
- Cambio en los hábitos sociales o aislamiento por pasar demasiado tiempo en actividades compulsivas, como juegos en línea.

¿Cómo actuar ante el TCI?
Cuando se identifica un trastorno del control de impulsos en una persona con Parkinson, es crucial actuar rápidamente para evitar que el problema empeore. A continuación, algunos pasos que pueden ser de ayuda:


- Consultar con el neurólogo: El primer paso es hablar con el médico. A menudo, el TCI está directamente relacionado con el tratamiento farmacológico, por lo que ajustar las dosis de los medicamentos dopaminérgicos o cambiar a otras opciones puede ser una solución efectiva. En algunos casos, reducir o suspender los agonistas dopaminérgicos mejora los síntomas del TCI.
- Terapia psicológica: La intervención de un psicólogo o psiquiatra especializado en trastornos conductuales puede ser muy útil. Terapias como la cognitivo-conductual (TCC) se han mostrado eficaces para ayudar a los pacientes a identificar patrones de comportamiento impulsivo y desarrollar estrategias para controlarlos.
- Apoyo familiar: El papel de la familia es clave. Es importante que los familiares comprendan la naturaleza del TCI y apoyen al paciente con comprensión y sin juzgar, ayudando a implementar medidas que limiten el acceso a situaciones de riesgo (por ejemplo, evitar casinos o restringir el acceso a tarjetas de crédito).
- Educación y prevención: Conocer los riesgos del TCI antes de comenzar el tratamiento con agonistas dopaminérgicos puede ayudar tanto a los pacientes como a sus familias a estar alerta y actuar antes de que el problema se agrave. Un seguimiento regular y sincero con el neurólogo puede ayudar a detectar cualquier cambio de comportamiento a tiempo.

Conclusión
El trastorno del control de impulsos es una complicación frecuente pero tratable en personas con Parkinson que reciben tratamiento con agonistas dopaminérgicos. Identificar los signos de TCI a tiempo y tomar medidas apropiadas puede mejorar significativamente la calidad de vida de los pacientes. La colaboración entre el paciente, su entorno familiar y los profesionales de la salud es clave para manejar este desafío.
Si bien el Parkinson presenta retos importantes en muchos aspectos de la vida, con el apoyo adecuado y las estrategias correctas, los trastornos como el TCI pueden ser controlados y gestionados de manera efectiva.
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Comentarios
A mi me ha pasado con las compras, pero antes del pk, también era bastante “ compradora “ .Asi que no se si será culpa del Requid.Primero tomaba 12 , después 8 ,ahora 4 y me lo querían bajar a 2 , pero sigo con cuatro. Tengo que contribuir al mantenimiento de la economía del país.Es broma, creo que no tengo ninguna adicción.